COVID -19 (SARS-COV-2)
Qué es COVID -19 (SARS-COV-2)
Un virus nuevo y novedoso llamado SARS-CoV-2 que puede causar una enfermedad respiratoria grave (llamado COVID-19) surgió en la ciudad de Wuhan, China a fines de diciembre de 2019 y posteriormente se extendió rápidamente por todo el mundo para crear una pandemia global. Este virus es un miembro de la familia de los coronavirus que incluye el virus del síndrome respiratorio agudo severo (SARS) y el virus del síndrome respiratorio del Medio Oriente (MERS), así como otros que pueden causar el resfriado común. El nuevo virus causa una enfermedad que afecta a múltiples órganos, incluidos los pulmones, el corazón, el cerebro, los vasos sanguíneos, los riñones y otros. En cuestión de meses, este virus provocó una gran epidemia de enfermedades respiratorias en la ciudad de Wuhan y la provincia de Hubei que se extendió a todas las demás provincias de China. Casi al mismo tiempo, los viajeros internacionales llevaron este virus a muchos otros países creando epidemias menores y mayores en todo el mundo.
La situación aún es fluida y está evolucionando en este momento (septiembre de 2020) con algunos países logrando el control de la transmisión (por ejemplo, Nueva Zelanda) mientras que otros están experimentando aumentos repentinos en los casos después de la relajación de las medidas de salud pública.
¿Cómo se obtiene COVID -19 (SARS-COV-2)?
El coronavirus que causa COVID-19 se transmite por gotitas respiratorias y aerosoles que se generan cuando una persona infectada ríe, grita, tose o estornuda. Estas gotitas microscópicas que contienen el virus luego se inhalan en el tracto respiratorio del contacto cercano. El virus también puede transmitirse al tocarse los ojos, la nariz y la boca con las manos cuando se contaminan con secreciones de una persona enferma.
Dependiendo del tipo de superficie, temperatura y humedad, el virus puede persistir en varias superficies durante días. Sin embargo, no está claro cuán infecciosas pueden ser las partículas de virus en las superficies.
Susceptibilidad y resistencia
Todas las personas son susceptibles.
¿Cuáles son los síntomas?
La mayoría de las personas infectadas desarrollan síntomas leves de enfermedad respiratoria, por ejemplo, fiebre leve y tos. Algunas personas infectadas no presentan síntomas. Aproximadamente el 15 por ciento de las personas infectadas desarrollan una enfermedad grave, con fiebre alta, tos seca y dificultad para respirar (indicativo de neumonía). Un número menor, alrededor del 5%, requiere cuidados intensivos y aproximadamente el 1% morirá, aunque aún no se ha definido la tasa de mortalidad real.
Medidas preventivas
Hasta la fecha no existe una vacuna. Las mejores medidas preventivas involucran las siguientes precauciones respiratorias, específicamente: 1) Evite el contacto cercano con personas que padecen infecciones respiratorias agudas; 2) Lávese las manos con frecuencia, especialmente después del contacto directo con personas enfermas o su entorno; use agua y jabón durante al menos 20 segundos o use un desinfectante para manos a base de alcohol si no hay agua y jabón disponibles; 3) Los viajeros con síntomas de infección respiratoria aguda deben practicar la etiqueta al toser (mantener la distancia, cubrir la tos y los estornudos con pañuelos desechables o ropa y lavarse las manos). 4) Evite viajar a áreas donde este virus se transmite activamente; 5) Busque atención médica de inmediato si se presentan síntomas después de visitar las áreas afectadas donde se está produciendo la transmisión.
En general, las autoridades de salud pública en casi todos los países exigen mantener una distancia de 2 metros (aproximadamente 6 pies) de los demás y usar una máscara (máscara) siempre que se encuentre en lugares públicos. Muchos países limitan el tamaño de las reuniones para reducir el número de contactos entre personas.
Tratamiento
No existe un tratamiento específico para COVID-19. Los pacientes críticos reciben tratamiento de apoyo para facilitar su respiración hasta la recuperación.
¿Dónde se produce habitualmente?
Hasta ahora (septiembre de 2020), este virus se ha propagado desde China a casi todos los países del mundo.
Los brotes de esta enfermedad están bien establecidos en muchos países. Están comenzando nuevos aumentos en el número de personas infectadas en todos los países principales que relajaron sus medidas de salud pública.