Un golpe militar sumió a la nación centroafricana de Gabón en un estado de caos absoluto. Un grupo de militares de alto rango tomó el poder en la capital, Libreville, el 30 de agosto, minutos después de que se anunciaran los resultados de las elecciones presidenciales. La medida destituyó al Presidente Ali Bongo Ondimba, cuya familia había detentado el poder de la nación durante casi 56 años.
¿Qué ha ocurrido?
Gabón acudió a las urnas el 26 de agosto y, a través de los resultados, Bongo fue reelegido para un tercer mandato con cerca de dos tercios de los votos. Los golpistas, un grupo de soldados amotinados, no estaban de acuerdo con los resultados oficiales y aparecieron en la televisión estatal anunciando la anulación de los resultados electorales. Según ellos, se trataba del primer paso dado para "poner fin al régimen actual". La oposición también declaró el 29 de agosto que su candidato, Albert Ondo Ossa, había ganado y que se había producido un fraude generalizado.
Los golpistas defendieron su maniobra mencionando que las elecciones "no reunían las condiciones para un escrutinio transparente, creíble e inclusivo, tan esperado por el pueblo de Gabón".
Tras la declaración del golpe
Tras el anuncio, cientos de personas salieron a las calles de Libreville para celebrar y dar la bienvenida al golpe. El 30 de agosto circularon por Internet vídeos de su celebración en los que se veía a los ciudadanos bailando y gritando "¡¡¡Liberados!!!" en el distrito de Nzeng Ayong de Libreville. Algunos vídeos también mostraban a soldados llevando a hombros al líder del golpe, Brice Oligui Ngeuma, llamándole "presidente".
Una de las razones de esta euforia pueden ser las acusaciones de fraude electoral y corrupción que pesan sobre Bongo desde que se convirtió en Presidente de Gabón hace más de 14 años.
El futuro de Gabón
En cuanto a lo que viene a continuación, se han disuelto las instituciones del Estado, lo que incluye "el Gobierno, el Senado, la Asamblea Nacional, el Tribunal Constitucional, el Consejo Económico, Social y Medioambiental y el Centro Electoral Gabonés". Según los medios de comunicación estatales, Bongo se encuentra actualmente bajo arresto domiciliario, su hijo está entre rejas y todas las fronteras y oficinas gubernamentales están aparentemente cerradas.
Aún quedan muchas cosas por determinar. En primer lugar se espera que los militares restablezcan temporalmente el Tribunal Constitucional y gradualmente los vuelos nacionales. Las fronteras nacionales también permanecerán cerradas hasta nuevo aviso. Los canales internacionales de radio y televisión reanudarán lentamente sus emisiones según las órdenes de Oligui.
Sus órdenes llegan mientras juraba como presidente interino el 4 de septiembre y prometía unas "elecciones libres, transparentes y creíbles", cuyo calendario aún no se ha mencionado. Sin embargo, siguen existiendo oscuridades sobre el futuro próximo de Gabón, ya que siguen sin respuesta muchas preguntas relacionadas con el liderazgo del país, las consecuencias del golpe para la reputación mundial de la nación centroafricana y sus relaciones diplomáticas.
Respuesta internacional
Mientras tanto, varios líderes mundiales han condenado la acción de los militares y también han advertido a sus propios ciudadanos atrapados en Gabón que se mantengan alerta y actúen con precaución. Entre ellos figuran organizaciones e instituciones como la Unión Africana (más de 55 Estados miembros), la Comunidad Económica de los Estados de África Central (CEEAC), las Naciones Unidas, la Unión Europea y países como Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y España.
Además del de Gabón, sólo en los últimos tres años se han registrado múltiples golpes de Estado en África. Muchos de estos países son conocidos por ser antiguas colonias francesas del continente. Entre ellos están Burkina Faso, Chad, Guinea, Malí, Níger y Túnez.