Líbano está situada en la orilla oriental del mar Mediterráneo. Su capital es Beiruty se compone de un área geográfica reducida. Líbano se enfrenta actualmente a una crisis del sector público debido al aumento de las huelgas, la ineficacia operativa, la recesión económica y la redundancia política.
¿Qué ha llevado a la situación actual?
A medida que el valor de la libra libanesa sigue bajando, el salario mensual medio de los funcionarios ha disminuido de unos 1.000 euros a 1.000 euros. $1.000 a apenas $50 - y contando.
Por ello, en los dos últimos meses, miles de empleados públicos libaneses han hecho huelga para protestar contra la caída de ingresos provocada por este colapso económico, uno de los peores de la historia moderna. Recientemente, 350 jueces libaneses no asistieron a los procedimientos judiciales durante una semana para exigir un aumento salarial. Aproximadamente seis de cada diez empleados del Estado están emigrando del país o tienen previsto hacerlo.
La infraestructura estatal está en un punto crítico debido a años de gasto desenfrenado, corrupción y preferencia por las mejoras a corto plazo frente a las de largo plazo. Los ingresos del Estado también se han desplomado a niveles peligrosamente bajos debido al retraso en la recaudación de impuestos durante dos meses, cuando los funcionarios de Hacienda se declararon en huelga.
La crisis energética ha hecho mella en la vida pública cotidiana. En el Parlamento, los guardias de seguridad suben y bajan mensajes por las escaleras porque no hay gasolina suficiente para alimentar el generador del ascensor.
En la actualidad NO seguro viajar a Líbano. Hay un creciente descontento público que puede provocar violencia entre los manifestantes y las fuerzas del orden. Es probable que se produzcan nuevas interrupciones en los servicios públicos esenciales. Debido a las continuas huelgas de funcionarios, los bancos, las oficinas del gobierno y otros organismos públicos están paralizados en Líbano.
Evaluación
Evite todas las protestas y huelgas, ya que incluso las pacíficas pueden volverse violentas rápidamente. Evite viajar cerca de los lugares de las protestas y planifique rutas alternativas. Garantizar el acceso a un refugio adecuado y a los servicios esenciales (como la energía) para minimizar las interrupciones y los riesgos para la seguridad. Evite hoteles y alojamientos privados que puedan sufrir daños durante la violencia de las protestas. Siga las noticias locales antes de viajar, ya que puede haber un alto riesgo para la seguridad en las atracciones turísticas más populares del Líbano.
Extreme las precauciones cuando visite lugares públicos. Recientemente ha habido una situación de rehenes en un banco federal en Beirut.
Las empresas pueden enfrentarse a crecientes perturbaciones debidas al descontento de los empleados y a las consiguientes huelgas. Las elevadas demandas salariales pueden provocar una espiral de costes inflacionistas insostenibles para las empresas.
Considere la posibilidad de Afiliación a Sitata que le proporcionará avisos de perturbaciones y amenazas mientras esté en tierra, así como asistencia de viaje de emergencia en caso de que se encuentre en una situación problemática.